
¿Qué pasaría si Kathy Selden hubiera seguido siendo la voz de Lina Lamont sin que nadie lo supiera?
JON GARCÍA
“Singin’ in the Rain”, una de las películas más divertidas y emocionantes de la década de los 50. Con una puesta en escena preciosa y unas canciones más que inolvidables, todo el mundo recuerda la bonita historia de amor de Don Lockwood y Kathy Selden.
Una historia en la que el talento de Kathy fue reconocido gracias a Lockwood, Cosmo y R. F. Simpson, destronando a la falsa reina de la película Lina Lamont. Todo en parte gracias al narcisismo y el ego de la propia Lina, el cual le condenó a que se descubriera el pastel de todo el engaño.
Pero, ¿qué pasaría si Kathy Selden hubiera seguido siendo la actriz de doblaje de Lina Lamont sin que nadie lo supiera?
Como ya hemos mencionado, Lina Lamont se condenó a desvelar que no sabía cantar frente a toda la prensa gracias a su ego. No obstante, si no hubiera sido por el consentimiento y la bondad de R. F. Simpson, Lockwood y Cosmo si hubieran tenido que quedar de brazos cruzados observando como Lina triunfaba, mientras la pobre Kathy cantaba doblándole detrás del telón.
Kathy hubiera sido la actriz de doblaje de Lina Lamont por el resto de su carrera y nunca hubiera podido mostrar su talento al público. Incluso, Lockwood hubiera salido repercutido, puesto que tendría que actuar junto a Lina y no junto a su verdadero amor.
Los años pasarían, y probablemente, harta de todo este teatrillo, Kathy dejaría a Lockwood entre lágrimas y huiría de la ciudad buscando algún otro trabajo con el que poder vivir. Lina Lamont se quedaría sin actriz de doblaje y se acabaría desvelando la verdad. Incluso después de todo esto puede que Lockwood y Kathy se volvieran a reconciliar gracias a Cosmo.
Lo que queda claro es que pasara lo que pasara, Lina Lamont estaba condenada al fracaso por su voz y por su puesto, por su ego. Por suerte, todos conocemos un final distinto que nos hizo reír y alegrarnos por la pareja de tortolitos.
Hasta aquí el “WHAT IF…?” de “Singin’ in the Rain”, espero que lo hayan disfrutado y ahora sepan un poco más acerca de este espléndido musical de la década de los 50.
Y recuerden, antes se coge al mentiroso que al cojo…